Seguramente no te has librado de padecer un dolor de cabeza en alguna ocasión o bien tienes la desgracia de padecerlos bastante seguido. Hoy te presentaré algunos remedios naturales, sencillos y muy efectivos, que pueden ayudarte a aliviar el malestar de manera rápida, práctica y muy segura.
Ahora, para empezar, es importante que sepas que cada dolor de cabeza es distinto en cuanto a su origen y síntomas, de ahí que su tratamiento también sea diferente en cada caso. Es por esto que lo primero es conocer las características del dolor que se padece para solucionarlo de la manera más efectiva y, en la medida de lo posible, aprender a prevenirlo.
Hay circunstancias puntuales que pueden desencadenar nuestros dolores de cabeza, entre las cuales, podemos mencionar las siguientes:
- Haber pasado una mala noche.
- Tener un cuadro de gripe, infección o fiebre.
- Pasar muchas horas frente a la computadora.
- Estrés emocional, relacionado con la familia, el trabajo o los amigos.
- Saltarse comidas.
- El consumo de alcohol.
- Falta de sueño.
- Ciertos medicamentos.
- Factores ambientales, como la contaminación, el ruido o los cambios de clima.
- Exceso de actividad física, entre otros.
Por otro lado, existen los dolores que se pueden definir como crónicos, y son aquellos que en ocasiones aparecen, a veces con aviso y otras de repente, en alguna zona de nuestra cabeza y nos acompañan durante horas, días e incluso semanas. Para controlar este tipo de molestias es necesario seguirles la pista e identificar en qué circunstancias suelen desencadenarse, y así lograr adelantarse a su aparición, evitando de esta manera que puedan resultar, incluso, incapacitantes.
Es un hecho que no todo el mundo padece el mismo dolor de cabeza ni éste se percibe con la misma intensidad en todos los que lo sufren. Esto se debe a que la cefalea, término con el que también se conoce a esta dolencia, puede responder a distintas causas y presentar características diversas según su aparición, intensidad, duración, etc. Entre todos estos, son dos los tipos de dolor de cabeza más comunes: la cefalea de tensión y la migraña.
La cefalea de tensión se encuentra directamente relacionada con el ritmo de vida actual y todo lo que conlleva: prisas, estrés, horarios irregulares -tanto de sueño como de comida-, etc. Éste se identifica por un dolor generalizado (como si se llevara un casco) y suele ir acompañado de una sensación de rigidez en hombros y nuca.
La migraña es un dolor de cabeza más fuerte. Hoy por hoy, sus causas aún no están del todo definidas. Parece que su origen es vascular, pero existe una serie de desencadenantes muy bien definidos: estrés, cambios hormonales, falta o exceso de sueño, ingesta de ciertos alimentos que son comúnmente consumidos, como queso, chocolate, alcohol y café. Aparece de manera brusca y suele afectar únicamente un lado de la cabeza; puede ir acompañado de náuseas, vómitos, intolerancia a la luz, ruido e irritabilidad. Una de sus peculiaridades es que a veces avisa de su inminente aparición, lo que representa una ventaja para poder tratarla a tiempo.
En cuanto a las sugerencias para tratar de manera natural esas jaquecas, te puedo mencionar que el agua te puede ayudar; he aquí cómo:
Baños calientes: están recomendados cuando el dolor de cabeza está desencadenado por el estrés o los días muy fríos. Lo ideal es añadir a la tina unas gotas de aceites esenciales relajantes (lavanda, azahar o neroli). Trata que la iluminación del baño sea la mínima y será mejor aún si recurres a la iluminación con velas.
Baño de pies: debes preparar dos palanganas, una con agua caliente y otra con agua tibia. Sumerge tus pies en el agua caliente y después en la tibia; ve alternando el cambio entre las dos palanganas durante quince minutos aproximadamente. Esto ayudará a activar tu circulación, ya que así se descongestiona la sangre de la zona de la cabeza y se reconduce hacia las extremidades aliviando el dolor de cabeza.
Ducha: un baño con agua caliente, aplicando los chorros en la zona del cuello y la cabeza, que es donde suele acumularse la tensión, es un remedio fácil y muy adecuado cuando se presentan dolores de cabeza incipientes.
Hielos: llena una bolsa con cubitos de hielo y hazle un nudo para evitar que se salgan. Acuéstate, relájate y ponte la bolsa en la cabeza. Tal vez puedes sentir que te quema, por lo que, si te resulta más cómodo, envuelve la bolsa en una toalla.
Compresas
Éstas son muy útiles para tratar estas molestias. Mira cómo lo hacen:
Vinagre: aplicado de distintas maneras puede ser un estupendo remedio ante los dolores de cabeza. Actúa, por un lado, a través del olfato; de hecho, olerlo es uno de los remedios más antiguos contra el dolor de cabeza. Puede aplicarse en forma de baños de vapor sobre la cabeza. En una olla pon a hervir partes iguales de agua y vinagre de sidra; cuando esté lista la mezcla, cubre tu cabeza con una toalla e inspira profundamente el vapor de la preparación.
Agua fría y caliente: las compresas alternadas de agua fría y caliente, aplicadas en la frente y en la nuca pueden ayudar, sobre todo si el dolor de cabeza se acompaña de un dolor tipo tensional en el cuello o las cervicales. Otra opción es colocar una bolsa de calor local.
Las esencias
Éstas pueden ser aplicadas de manera local, inhaladas en difusores o bien también puedes recurrir a su presentación en incienso.
Lavanda: quizá es uno de los aceites más famosos, ya que es muy útil en el alivio del dolor y la relajación. Posee propiedades antiinflamatorias y sedantes, por lo que es muy conveniente para aliviar la tensión muscular, los espasmos y el dolor de cabeza.
Menta: debido a su poder dilatador funciona aliviando el dolor de cabeza. Puedes aplicar unas gotas de este aceite en un paño mojado con agua fría y colocarlo sobre tu frente durante diez minutos. Durante este tiempo, relájate para que el remedio surta efecto.
Romero: es una planta muy útil para tratar el dolor de cabeza; alivia la ansiedad y las tensiones musculares. Contiene ácido rosmarínico, potente analgésico y antiinflamatorio parecido al ibuprofeno. Inhala sus vapores mediante su aplicación en un difusor.
Albahaca: posee propiedades relajantes y ansiolíticas, por lo que inhalar su aroma o incluso preparar una infusión con hojas frescas, puede ser muy útil para aliviar dolores de cabeza relacionados con tensión.
Automasajes
Aunque no lo creas, un masaje aplicado correctamente por el lapso de unos minutos puede quitar el dolor de cabeza; ahora, no debe realizarse en cualquier parte, debe darse específicamente en los siguientes puntos: sobre los ojos, las sienes, el cráneo y la nuca.
En los ojos: utiliza el dedo índice, el pulgar y el medio de cada mano para hacer un suave masaje en sentido rotatorio alrededor de los ojos, primero hacia fuera y luego hacia dentro. Haz entre siete y diez veces en cada sentido.
En la cabeza: después, con la punta de los dedos medios, parte del interior de las cejas hacia las sienes y continua a lo largo del cuero cabelludo, en dirección al borde interior de la región occipital. Con el borde de las palmas de las manos se presiona firmemente sobre los lados de la cabeza, desde la frente hasta la nuca. Repite este movimiento unas treinta veces, sentirás gran alivio.
En las sienes: estos son puntos clave, tanto en el desarrollo de un dolor de cabeza como en el control del mismo. Aplicar sobre ellas determinados aceites y sustancias, acompañadas de un ligero masaje, puede ser un remedio exprés para un molesto dolor de cabeza, sobre todo en las etapas iniciales.
Como puedes ver, existen variadas opciones naturales para tratar una molesta jaqueca; antes de recurrir a tomar una medicina te invito a que les des una oportunidad.
Recuerda… ¡tú generas el cambio!
