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Grosellas Negras: Potentes Aliadas Naturales para la Salud Vascular

De tonos intensos y un sabor naturalmente ácido, las grosellas negras ofrecen mucho más que sabor. Son una fuente concentrada de vitamina C y polifenoles, compuestos que les dan su característico color púrpura y un potente poder antioxidante. La ciencia ha sugerido que estos nutrientes podrían proteger el sistema vascular, especialmente en personas que no consumen suficientes frutas y verduras.

El estudio

Investigadores de la Universidad de Dundee, en Tayside, Escocia, realizaron un ensayo clínico controlado para evaluar cómo el consumo de grosellas negras afecta la función vascular y el estrés oxidativo. Participaron 66 adultos sanos que ingerían menos de dos porciones de frutas y verduras al día.

Durante seis semanas, los participantes consumieron jugos naturales de grosella negra con distintos contenidos de polifenoles (aproximadamente 250 ml, varias veces al día) o un placebo. Los investigadores midieron la dilatación mediada por flujo, un indicador de la salud de los vasos sanguíneos, junto con niveles de vitamina C y marcadores de estrés oxidativo.

Los resultados

Al finalizar el estudio, quienes consumieron el jugo de grosella negra con alto contenido de polifenoles mostraron una mejora significativa en la función endotelial, en comparación con una ligera disminución en el grupo placebo.

Los niveles de vitamina C aumentaron notablemente, especialmente en quienes consumieron mayor cantidad de grosellas, mientras que los marcadores de estrés oxidativo disminuyeron significativamente. Los beneficios vasculares se relacionaron con un efecto sinérgico entre la vitamina C y los polifenoles naturales.

¿Qué significa esto?

Este ensayo clínico evidencia que incorporar grosellas negras a la dieta diaria puede contribuir de manera natural a la salud vascular, especialmente en personas con bajo consumo de frutas y verduras. Los beneficios se deben principalmente a la vitamina C y a los polifenoles, potentes antioxidantes presentes en estas frutas.

Otros alimentos ricos en antioxidantes y compuestos que favorecen la salud del corazón incluyen arándanos, granadas y uvas negras, y también pueden integrarse fácilmente a la dieta diaria.

Añadir grosellas negras frescas o jugo natural de grosella a tu alimentación es una forma sencilla y sabrosa de aumentar la ingesta de antioxidantes y apoyar la salud cardiovascular a largo plazo.

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