Macarrones con queso clásico

Ingredientes 

1 calabaza moscada mediana, sin semillas y picada en cubos 

2 cucharaditas de aceite de oliva

300 g de macarrones

1 litro de leche de soya sin azúcar

1 cebolla

100 g margarina de soya 

80 g de harina común

1 cucharadita de mostaza (opcional)

Gran puñado de espinacas tiernas

40 g de pan vegano casero picado

10 tomates cherry, cortados por la mitad

Método

Precalentar el horno a gas 6, 180 ° C, ventilador 200 ° C. Extienda la calabaza en una bandeja para hornear, rocíe con el aceite y mezcle para combinar. Ase en el horno durante 20 minutos.

Mientras la calabaza está en el horno, cocine los macarrones según las instrucciones del paquete.

Pelar y picar la cebolla por la mitad y agregar a una sartén con la leche, luego calentar suavemente hasta que burbujee. Retirar la cebolla y reservar la leche.

Derrita la pasta para untar en una cacerola grande a fuego lento y luego agregue lentamente la harina, batiendo hasta que se forme una pasta. Luego, vierta lentamente la leche tibia en la pasta, batiendo después de cada adición hasta que quede suave. Una vez que hayas agregado toda la leche y tengas un líquido suave, burbujea durante 8 minutos a fuego lento, batiendo ocasionalmente para evitar que se pegue, hasta que espese. 

Una vez cocido, machaca un tercio de la nuez asada con la salsa blanca. Sazone al gusto. Escurre la pasta e inclínala sobre la salsa junto con el resto de los trozos de calabaza y las espinacas tiernas. Revuelva suavemente para combinar, luego transfiera la mezcla a un plato grande para horno.

Coloque los pedazos de pan en una bolsa para sándwich y golpéelos suavemente con un rodillo hasta que tengan una consistencia áspera como una miga. En un bol, añadir un chorrito de agua a las migas, combinar y dejar reposar unos minutos. Coloca los tomates cherry cortados por la mitad sobre la pasta y esparce sobre las migas. Hornee en el horno durante 20 minutos o hasta que esté dorado y burbujeante.